Escuela Secundaria de Holly (Primera fase – 2016)

Acompañando los proyectos educativos del Ministerio de Educación, la Asociación se planteó la intervención en la educación secundaria. La educación secundaria es una vía para la formación de profesionales cualificados que pueden ayudar al desarrollo del país. Desde hace tres años, la educación obligatoria se ha extendido hasta los 16 años y hay una gran necesidad de escuelas secundarias. Apoyar los planes de las autoridades locales tiene la ventaja de que las actuaciones se aplican a necesidades objetivas detectadas por ellas y por lo tanto se cuenta con el apoyo y el compromiso de la población y de todos los actores de la educación.

Un grupo de personas de Holly, entre los que estaban sus representantes: consejeros, jefe de tierra, responsable de desarrollo comunitario y ancianos; plantearon a los miembros de la Asociación Escuela Sansana, acompañados por el inspector de educación de la zona, las necesidades educativas, que la Asociación estudió y posteriormente aprobó dentro de un proyecto general.

Holly alberga el dispensario de la zona y es el centro de otros pueblos más pequeños. Sus habitantes tienen un gran interés por la educación: dispone de una Escuela Primaria y ha hecho un gran esfuerzo por crear una Escuela Secundaria, aunque de forma muy precaria. De los tres cursos de secundaria, uno ocupaba un aula de la Escuela Primaria, que tuvo que trasladarse a la casa de un profesor, y los otros dos estaban en una especie de almacén sin ninguna clase de servicios a 3 km de la Escuela Primaria. El problema se agravaría con la incorporación del cuarto curso.

Se han construido las tres aulas del Edificio A con su dotación de muebles y material pedagógico, dos bloques de cuatro letrinas cada uno y un campo de deportes, que están en funcionamiento desde comienzos del curso 2016-2017. Una de las aulas y al despacho del director han sido equipados con iluminación por energía solar.

 

Escuela Secundaria de Holly (segunda fase – 2017)

En febrero de 2017 se ha inició la segunda fase de la Escuela Secundaria: tres nuevas aulas, un despacho de dirección, un almacén y una cocina. Se incluye el amueblamiento y la dotación pedagógica inicial.  Durante la ejecución del proyecto, los beneficiarios han colaborado en las obras aportando agua y su trabajo. La asociación de padres que se creó el año pasado ha ayudado al mantenimiento de las instalaciones educativas.

Las obras se terminaron a mediados del mes de junio y los alumnos iniciaron el curso 2017-2018 en las nuevas instalaciones.